Corría 1997 cuando el festival Aquasella nacía como un evento musical creado por unos fanáticos del TECHNO. Empezó como una fiesta para amigos, para gente que cada fin de semana se encontraba en clubes de la zona norte de España con el único nexo común, en muchos casos, de ser aficionados a la música electrónica.
Han pasado 26 años desde entonces y el festival ha evolucionado en diversos sentidos, pero lo que no hay cambiado ni un ápice es que sigue siendo un evento para amig@s. Aunque seáis miles los que asistan a cada edidicón continúa existiendo la esencia original, la del buen rollo, la del ambiente familiar y, sobre todo, esa pasión por la música.