Desde su inauguración en 2015, Suhescun se ha convertido en un epicentro para el metal y el rock en Iparralde, la región vascofrancesa. A pesar de su pequeña población de tan solo 174 habitantes, los fines de semana le otorgan un nuevo título: la «capital del metal». A unos 45 kilómetros de Bayona y a 558 kilómetros de Clisson, donde tiene lugar el famoso Hellfest, Suhescun se erige como un referente para diversas expresiones del rock y el metal.
El Buru Beltz Fest congrega anualmente a una decena de bandas, mayoritariamente provenientes del norte de España y del sur de Francia. Este festival consolida un vínculo musical único en la región y fomenta la conexión entre ambos países. La fusión entre el metal y el encanto rural de Suhescun crea un ambiente verdaderamente característico. Entre los asistentes se percibe un espíritu de camaradería y una devoción compartida por los decibelios, generando una experiencia memorable que genera lealtad año tras año entre el público asistente.